AISLINN

Imagino que no hay nada más bello

que contemplarte en la mañana

con los rayos del sol en tu rostro

y tu imagen dulce y hermosa.

Muñeca angelical que cautiva mi alma

en tus ojos brilla una estrella fugaz

en tus labios dibujada una sonrisa

siempre así quedita, emerge sin prisa.

Cuando llego a casa cansada y sin aliento

y te miro tan hermosa, no sé lo que siento,

me llenas de energía, me devuelves las ansias

y voy tras de tí, tus ágiles pasos cuidando.

Eres capullito en flor, pedazo de luna clara

eres como un botón que se abre para mi alma,

te miro ahora crecer, suave como una rosa

que va abriendo sus pétalos conforme pasa el tiempo.

¡ Cuánta alegría has traido a esta casa !

Llenas con tu cariño, con tu dulce mirar c

ada espacio que recorres en nuestro hogar

y no siento ni el cansancio ni las horas pasar.

¡ Gracias le doy a Dios por tenerte a nuestro lado !

Me devuelves la alegría, me das fortaleza,

Linn, mi niña bella, dulce y travieza

tú eres quien ilumina los momentos de tristeza.

¡ Camina segura, yo cuidaré tus pasos

y cuando Tú caigas, te tomaré en mis brazos !